Microsoft: Seguridad y Confianza es lo que sobra…

Días atrás la gente de Microsoft nos convocó a sus oficinas para presentarnos los resultados de un estudio sobre lo que hacen los adolescentes en Internet. Y parece que los resultados son, por lo menos, preocupantes. Pero antes de eso, un ejecutivo de la compañía y un funcionario público hicieron una síntesis de la colaboración que se están prestando entre ellos, es decir, entre la empresa privada y el Estado.

Cuando llegamos estaba hablando Alejandro Anderlic, director de Legales y Asuntos Corporativos de Microsoft Argentina y Uruguay, quien comentaba que hay una norma ISO sobre seguridad en redes y privacidad de los datos, la ISO/IEC 27018 “el primer estándar internacional que regula los servicios en la Nube” y que Microsoft la certificó. E insistió que Microsoft puede estar almacenando los datos de los usuarios, pero los propietarios son ellos, no la compañía.

Juan Cruz González Allonca, Director de la Dirección Nacional de Protección de Datos Personales, dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, por su parte, habló de un acuerdo con la softwerera para compartir información relevante con el estado sobre delitos cibernéticos y agregó que en el año 2003 se firmó un acuerdo sobre privacidad de los datos muy semejante a la que ya había en Europa.

“La privacidad es un derecho humano y como tal tiene que ser protegido” resaltó el funcionario y añadió que “El estado no le suelta la mano al usuario cuando navega por Internet” teniendo en cuenta la cantidad de datos que salen del país, especialmente en la actualidad de la nube.

Anderlic manifestó que “Tenemos que crear confianza para que la gente confíe en la tecnología que usa” y terminó con la mención del sitio web que hicieron en conjunto: www.Convosenlaweb.gob.ar (sucesor de aquel famoso Navega Protegido, que era una iniciativa sólo de MS).

Después fue el turno de Jorge Cella, director de Tecnología y Ciudadanía Corporativa de Microsoft Argentina y Uruguay, que presentó a Roxana Morduchowicz, especialista en cultura juvenil, quien estuvo a cargo de coordinar el estudio, llamado “La Nube: Seguridad y Confianza en Internet”.

Lo más relevante, conceptualmente hablando, que sostuvo Roxana, fue que “difícilmente podemos decir que los chicos de hoy se comunican menos; al contrario, se comunican mucho, pero de otras maneras”, lo que nos hizo sentir viejos a varios de los que estábamos presentes.

El estudio se hizo en base a una encuesta que comprendió a unos 650 adolescentes de 15 a 17 años, de la Ciudad de Buenos Aires y de escuelas públicas y privadas. El 90% de los adolescentes tiene un perfil en una red social, cualquiera sea su nivel social. Uno de los detalles interesantes que surgieron del estudio es que las diferencias entre los que asisten a escuelas públicas y privadas no están en las escuelas sino en las casas. Los alumnos de escuelas privadas puede que tengan mejor acceso a Internet desde sus casas que los de escuelas públicas, pero que a la hora de interactuar online, lo hacen de la misma manera.

Algunos de los resultados más relevantes:

• Navegar en Internet es la actividad que más tiempo ocupa a los adolescentes de su tiempo libre. 4 de cada 10 están conectados las 24 hs.
• Los chicos de hoy hacen todo por Internet: se comunican, escuchan música, miran películas y series, juegan, hacen la tarea escolar, etc. Expresan una alta credibilidad en la Red (ergo, analizan menos) y no dejan nada sin compartir (o sea, no miden la privacidad). El 20% guarda toda su información en la Web.
• La mitad de los chicos encuestados tuvo algún incidente desagradable en Internet, pero de ellos, el 70% no hizo nada y sólo el 5% habló con sus padres. 4 de cada 10 participó de alguna manera en una acción de bullying y/o publicó fotos de otros sin permiso.
• Pero quizá lo más preocupante de todo es que por lo menos la mitad de los pibes y las pibas que se conectan piensan que no les va a pasar nada porque “tienen todo controlado” o “saben qué hacer”. Que los padres no son referentes de estos temas para los chicos y la escuela prácticamente no existe como interlocutora.

En un aparte le pregunté a Roxana quiénes serían, entonces, los interlocutores válidos de los chicos y la respuesta no fue para nada inesperada: los amigos.

Después de ver estos resultados, de la respuesta de Roxana y de pensar que hace unos cuantos años que venimos viendo acciones de Microsoft y de otras empresas e iniciativas (Argentina Cibersegura, para dar otro ejemplo), y lo que, humildemente, podemos hacer desde los medios, la pregunta que me cae de madura es una sola: ¿en qué fallamos?